Postergan el juicio al profesor de inglés acusado de abusar a niños en La Plata

El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) IV de La Plata confirmó ayer la suspensión y nueva fecha del juicio que debía realizarse en estos días al profesor de inglés Martín Gregorio Pérez por "abuso sexual gravemente ultrajante, abuso sexual con acceso carnal, corrupción de menores calificada, abuso sexual, publicación y reproducción de imágenes pornográficas".

 

Los jueces del TOC IV luego de escuchar a la fiscalía y a la defensa por sus "problemas de agenda" reprogramó el debate oral para el 30 de noviembre de 2026, con cinco jornadas de audiencias. Según se informó, fue la fecha más "próxima" que pudo otorgar, ya que el tribunal tiene la agenda con juicios programados hasta mediados de 2027.

 

En la resolución, se mencionó que "téngase en cuenta, además, que originalmente -y atento la complejidad de la causa- se habían previsto diez jornadas para la realización del juicio, requerimiento que fuera finalmente acotado a cinco días, los que posteriormente se redujeron a tres; y que, por último, ante la licencia solicitada por la jueza integrante del Tribunal, quedó fijada en solo dos jornadas lo que, tal cual lo manifiesta la defensa, no son suficientes para desarrollar toda la prueba, con prima facie treinta y cinco testigos, amén de las demás vicisitudes del debate".

 

Estos aberrantes hechos que se le endilgan se dieron a conocer en 2017 y, según la causa elevada a juicio, tendría a varios menores como víctimas de entre 9 y 10 años de edad.

 

El docente Martín Pérez es fanático de Lewis Carroll y su obra, "Alicia en el País de las Maravillas", por lo que se convirtió en uno de los coleccionistas más grandes del rubro.

 

En las actuaciones también se acreditó que, al margen de su afán por la docencia, Pérez se convirtió en uno de los grandes coleccionistas de la especialidad en la Argentina. Con más de mil piezas y numerosas publicaciones diferentes originales, llegó a ser objeto de entrevistas en algunos medios periodísticos de gran alcance.

 

También se supo que la pasión por la historia fantástica, creada por el escritor británico Charles Dogson, más conocido por su seudónimo Lewis Carroll, también le había permitido al acusado Pérez brindar talleres y clases a niños sobre el tema.

 

Ultrajes filmados

 

En el comienzo de la investigación, el profesor de inglés había sido detenido por supuesto abuso sexual infantil, a raíz de la denuncia de las familias de cuatro víctimas. Una vez allanado su domicilio y secuestrados objetos como libros, ropas y computadoras, se descubrió que en una de las laptops el hombre había guardado videos en los que se filmaba cometiendo los abusos contra los niños.

 

Según información oficial, quienes aparecieron en esos documentos audiovisuales no eran los chicos cuyas familias radicaron la denuncia, por lo que se resolvió que Pérez había abusado de al menos otros seis menores.

 

La propia historia de "Alicia en el País de las Maravillas" también apareció entre las vejaciones: de acuerdo a la investigación oficial, el profesor les enseñaba dibujos a los chicos en los que Alicia misma mantenía relaciones sexuales con otros personajes de la historia.

 

En el mundo de los fanáticos de Carroll y de su publicación más conocida, Pérez utilizaba el seudónimo de Cheshire Cat Catroll, en homenaje a "Cheshire, el gato", un personaje que tenía la capacidad de aparecer y desaparecer a voluntad y entretenía a Alicia mediante conversaciones filosóficas.

 

En su cuenta de Facebook se percibía cómo, al menos a la luz pública, su mundo entero parecía reducirse al "planeta de Alicia". Homenajes de todo tipo a la historia, elogios a Carroll y a las fotografías de chicas que el escritor británico tomaba a mediados del siglo XIX.

 

A lo largo de todo el perfil, se podían observar varias fotografías de chicas menores de edad que el propio Lewis Carroll había tomado en su momento y algunas otras ilustraciones de "Alicia en el país...", con una tonalidad erótica.

 

Las cuatro familias denunciantes alegaron situaciones ocurridas durante 2016 entre el propio Pérez y cuatro niñas de entre 9 y 10 años, donde acusan al profesor de enseñar material pornográfico y de manosear a las chicas.